Parece que arranca el buen tiempo. ¿No os apetece comer cosas frías? A mi el cuerpo me lo empieza a pedir ya.

Hoy os presento al rey de la mesa. El flan de leche condensada de toda la vida. Poco a poco he ido variando los tiempos de cocción hasta llegar al punto de flan cremoso que tanto me gusta.
Para apreciar bien el sabor de este flan, es mejor hacerlo el día antes de servirlo y comerlo bien fresquito.

Ingredientes
1 bote mediano de leche condensada
1 y 1/2 bote de leche
3 huevos
4 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de agua
Zumo de 1/2 limón

En una flanera hacer un caramelo con el azúcar, al agua y el zumo de limón.
Batir la leche condensada junto con la leche y los huevos y echar la mezcla en la flanera. Cocer en la olla al baño maría durante 3 minutos.

Dejar enfriar y servir.

A mí me gusta muy poco hecho porque así resulta más cremoso. La cocción va a depender del tipo de olla.

Podéis hacer el flan en función de los comensales. Si es para 6 u 8 personas debéis usar el bote grande de leche condensada y el resto de ingredientes se mantiene igual y si es para menos de 4 podéis hacerlo con la mitad, es decir, usando el bote pequeño de leche condensada y un huevo menos.