Delicioso. No puedo definirlo de otra manera.
Puede comerse tanto recién hecho, como de un día para otro y así está aún más rico.

¿Qué no sabes que hacer con el pan que te ha sobrado del día anterior? No lo tires, aquí te dejo la receta para que lo conviertas en algo con lo que te chuparás los dedos.

Ingredientes
8 rebanadas de pan del día anterior
3 manzanas
Pasas de Corintio
2 vasos de leche
1 cucharada de azúcar
1 rama de canela
1 Huevo
Aceite

Preparar una compota con las manzanas y las pasas. Para ello añadiremos una cucharada de agua y una ramita de canela. Dejeremos cocer unos minutos y reservamos.

Mezclar la leche con el azúcar y remojar en ella las rebanadas de pan. Poner sobre un papel absorbente para eliminar el exceso de leche. Pasar por el huevo por los dos lados cada rebanada y freimos en aceite muy caliente. Una vez más, las iremos colocando sobre papel absorbente para quitar el aceite sobrante y evitar que queden muy grasientas.


Untar una rebanada de pan con la compota de manzana y cubrir con otra rebanada. Hacer lo mismo con todas hasta terminar todo el pan. Dejar enfriar y servir.

Tengo que decir que están más ricas de un día para otro pero, como todo, esto va en gustos.