Casi una semana llevaba la barra de pan esperando su destino final, y le ha llegado hoy. Mira que me cuesta decidirme a hacer las cosas. Ahora, eso sí, cuando me pongo, me pongo!!!!!!!!! Y hoy ha sido uno de esos días.
Me levanté esta mañana y lo tenía claro; había que quitarla de en medio; pues no se iba a quedar eternamente en mi cocina.... faltaría más!!!! Así que me puse manos a la obra -bueno, en realidad a la masa- y empecé por cortarla en pedacitos pequeños. Claro, a esta le han seguido unos cuantos pedazos más que tenía por ahí rodando...
El resultado... una tortilla de pan dulce. Sí, habéis leído bien. Tortilla de pan. Y no sabéis lo buena que está. Ya la he hecho más veces. De hecho, hubo una temporada que metí tanto el gusanillo en el cuerpo (o en el estómago) a mis amigas, que durante una semana no hacían más que llegarme fotos de tortillas de pan por el móvil. Creo que ya se les ha pasado un poco la fiebre!!! Todo sea que lean la entrada de hoy y les dé de nuevo la locura y se pongan a hacer tortillas como locas de nuevo.
Va por vosotras chicas!!!! Bueno, y por vuestros maridos que tuvieron la gran suerte de probarlas...
Ingredientes
400 gr de pan de días anteriores
400-500 ml de leche
125 gr de azúcar
4 huevos
Ralladura de 1 limón
Ralladura de 1 naranja
1/2 cucharadita de canela molida
Picar el pan en rebanadas finas. Echar en un bol grande y añadir la leche. No la echéis de golpe, pues la cantidad va a variar dependiendo de cómo de duro esté el pan. Yo usé el medio litro porque mi pan estaba demasiado duro, pero si lo hacéis con pan tierno es posible que os baste con los 400 ml. os tiene que quedar una pasta, pero no demasiado líquida. Consiste en empapar el pan, no en calarlo.
Le vais dando vueltas de vez en cuando con una cuchara hasta que se empape bien todo el pan. Añadís el azúcar y removéis. Incorporar las ralladuras del limón y la naranja y la canela y mezcláis todo bien.
Batir los huevos y echarlos en el pan. Mezcláis de nuevo.
Ahora sólo queda cuajar la tortilla. Para ello, untáis una sartén antiadherente con un poco de aceite y volcáis la masa. Cuando esté cuajada por un lado le dáis la vuelta para hacerla por el otro.Como si de una tortilla de patata se tratara.
Volcáis sobre una fuente y dejáis templar antes de comerla.
Buen provecho!!!!!!!!!!!
Me levanté esta mañana y lo tenía claro; había que quitarla de en medio; pues no se iba a quedar eternamente en mi cocina.... faltaría más!!!! Así que me puse manos a la obra -bueno, en realidad a la masa- y empecé por cortarla en pedacitos pequeños. Claro, a esta le han seguido unos cuantos pedazos más que tenía por ahí rodando...
El resultado... una tortilla de pan dulce. Sí, habéis leído bien. Tortilla de pan. Y no sabéis lo buena que está. Ya la he hecho más veces. De hecho, hubo una temporada que metí tanto el gusanillo en el cuerpo (o en el estómago) a mis amigas, que durante una semana no hacían más que llegarme fotos de tortillas de pan por el móvil. Creo que ya se les ha pasado un poco la fiebre!!! Todo sea que lean la entrada de hoy y les dé de nuevo la locura y se pongan a hacer tortillas como locas de nuevo.
Va por vosotras chicas!!!! Bueno, y por vuestros maridos que tuvieron la gran suerte de probarlas...
Ingredientes
400 gr de pan de días anteriores
400-500 ml de leche
125 gr de azúcar
4 huevos
Ralladura de 1 limón
Ralladura de 1 naranja
1/2 cucharadita de canela molida
Picar el pan en rebanadas finas. Echar en un bol grande y añadir la leche. No la echéis de golpe, pues la cantidad va a variar dependiendo de cómo de duro esté el pan. Yo usé el medio litro porque mi pan estaba demasiado duro, pero si lo hacéis con pan tierno es posible que os baste con los 400 ml. os tiene que quedar una pasta, pero no demasiado líquida. Consiste en empapar el pan, no en calarlo.
Le vais dando vueltas de vez en cuando con una cuchara hasta que se empape bien todo el pan. Añadís el azúcar y removéis. Incorporar las ralladuras del limón y la naranja y la canela y mezcláis todo bien.
Batir los huevos y echarlos en el pan. Mezcláis de nuevo.
Ahora sólo queda cuajar la tortilla. Para ello, untáis una sartén antiadherente con un poco de aceite y volcáis la masa. Cuando esté cuajada por un lado le dáis la vuelta para hacerla por el otro.Como si de una tortilla de patata se tratara.
Volcáis sobre una fuente y dejáis templar antes de comerla.
Buen provecho!!!!!!!!!!!