Este mes el TS nos lleva hasta nuestra infancia recordando esas excursiones o salidas al campo con nuestros padres y amigos. Comida para llevar, sí, pero no una cualquiera, no….. aquella que nuestras madres nos preparaban para el bocata o la fiambrera de la excursión.

Yo me he decidido por una de las cosas que más me gustan y que a mis hijos, sobre todo al mayor, también le pierde, los filetes de pollo empanados. Recuerdo cuando iba de excursión con el cole, que era uno de los rellenos del bocata, además del de lomo o el de tortilla, pero me he decidido por el primero, porque es una de las cosas que más a menudo se come en mi casa.

También era una de las cosas que mi madre preparaba cuando salíamos al campo a pasar el día, como acompañamiento a la ensaladilla rusa y a la tortilla de patata que nos servía a la hora de la comida o la merienda. Luego, a mi madre se le complicó más la cosa, pues éramos socios de un club social y comíamos allí todos los sábados y domingos desde junio hasta septiembre, con lo que las comidas eran más de andar por casa. Y luego estaban aquellas barbacoas y paellas que nos preparábamos allí de vez en cuando, que hacían que un sábado cualquiera se convirtiese en un gran día de fiesta.

Ahora, recuerdo con añoranza aquellas salidas al campo, cuando aún estaba permitido hacer barbacoas en el campo, y cocinar al aire libre. Cuando salir a correr y respirar aire puro y limpio era lo que nos quitaba el sueño la noche antes de la excursión. Cuando cargábamos el coche con las neveras repletas de hielos para que las bebidas aguantasen fresquitas durante todo el día, el infiernillo para hacer la paella, las mantas de tiras (aún tenemos unas cuantas en casa) para echarnos la siesta después de comer…. Las bicicletas, las cartas de naipes, el dominó… Aquellas partidas y juegos en familia…. Qué tiempos aquellos…. Y qué buenos que eran!!!!!

Bueno, que me pongo nostálgica. Vamos con la receta que es lo que hoy nos ha traído hasta aquí….

Ingredientes

1 pechuga de pollo en filetes

1 vaso de leche

Ajo en polvo

Perejil picado

Sal

Pan rallado

Aceite de oliva

En un bol ponemos la leche, la sal, el ajo en polvo y el perejil. Mezclamos bien. Ponemos a macerar los filetes de pollo, yo los dejo de un día para otro, pero si vais con prisa con 15 minutos les vale.

En un plato ponemos pan rallado. Pasamos por el los filetes de pollo escurridos y freímos en abundante aceite caliente.

Cuando estén dorados los sacamos y colocamos sobre papel absorbente para que suelten el exceso de aceite.