Nada como levantarse por las mañanas y poder desayunar unas deliciosas magdalenas recién hechas. Y si además son caseras pues ya estoy perdida.
Tenía (y tengo) calabaza congelada para tirar de ella cuando tenga necesidad...o antojo, como fue el caso de estos cupcakes. Combinados con naranja y chocolate ya son una perdición. Así que preparaos para empezar a comerlos y no saber cuando parar.
Jugosos no es la palabra....son súper húmedos por dentro y eso los hacen delicados al paladar. No son nada empalagosos, ni dulces en exceso. Con las cantidades que os doy me salieron 18 cupcakes...y os aseguro que no duraron en casa más de dos días. Os dejo la receta por si se os antoja probar uno de estos... o dos, o tres!!!
Ingredientes
110 gr de mantequilla
200 gr de azúcar
2 huevos
300 gr de calabaza
1 naranja
200 gr de harina
2 cucharaditas de levadura química (polvo de hornear)
1 cucharada de leche
Cobertura de chocolate
100 gr de chocolate de cobertura
100 gr de nata
50 gr de mantequilla
Poner el azúcar junto con la mantequilla en un bol y batir con una batidora de varillas hasta que la mezcla quede cremosa y blanquecina.
Añadir los huevos de uno en uno y bate. Hasta que no esté integrado el primero, no añadir el segundo.
Añadir la ralladura y el zumo de naranja. Incorporar el puré de calabaza.
Tamiza la harina con la levadura sobre la masa y mezclar todo con movimientos envolventes usando una espátula. Por último añadir la leche y mezclar bien.
Rellenar las cápsulas no más de 2/3 de su capacidad. Hornear a 180ºC durante 20 minutos. Comprueban con un palillo pinchando en el centro del cupcake si está cocinado del todo. Dejar reposar 5 minutos en la bandeja y después colocarlos en una rejilla para que se terminen de enfriar.